Desde Triana

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3 de octubre de 2011

La herencia del Sr Monteseirin

No era suficiente dejar una deuda que hasta el momento asciende a 700 millones de euros, había que superarse y lograr un más dificil todavía, para lo cual, días antes de las elecciones, nuestro "magnifico" alcalde Alfredito el bueno, firma un acuerdo con la constructora Sacri para que, lo que parecía que era un derecho de los sevillanos,disfrutar de la panorámica de Sevilla desde el mirador de las llamadas setas,pasase a un pago encubierto, comprometiendose el ayuntamiento al abono de 450.000 euros anuales por disfrutar de dicho derecho.Seguramente le parecería que su faraónica obra, nacida de su megalomanía de grandeza, le había salido muy barata al pueblo de Sevilla, que los más de 100 millones de costo de la obra, más el añadido del pago del arrendamiento de las oficinas de la hacienda municipal situadas en la Plaza de la Encarnación, que fueron entregadas en parte del pago de las obras y que suponen 60,000 euros al mes.Además de haberle otorgado la concesión administrativa de las torres durante 75 años, con la única excepción de los puestos de la plaza de abasto, cuyos locales revertiran en la propia constructora tal como vayan quedando sin actividad, y a todo esto le añadimos las visitas a los restos arqueológicos y las subidas al mirador.
Creo que nos encontramos ante un echo único desde sus inicios. Se construye en terrno público, se paga las obras con dinero público,y la explotación redunda en una empresa privada.
Y como faltaba la guinda, para redondear los desafueros cometidos por este ayuntamiento, el Tribunal Supremo reitera en otra sentencia, que la bibliotéca del Prado es ilegal, por lo cual tiene que proceder a su demolición.
Se puede asegurar que sobre en erario público han dejado caer una pesada loza que va a condicionar la actividad del ayuntamiento durante largos años.
El Sr Monteseirin dijo que quería ser recordado por lo que hizo por Sevilla, yo creo que va a ser recordado por lo que hizo con Sevilla.

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