Desde Triana

Desde Triana

31 de julio de 2011

Efemeride

En el mes de Julio,cuando Triana se viste de fiesta para homenajear a su abuela Santa Ana, es tambièn un mes para recordar una efeméride,la puesta en servicio de la primera linea de transporte fluvial.
En España la era del vapor empezò a dar sus primeros pasos en 1817,cuando un buque de estas caracterìstica, el Real Fernando,popularmente conocido como "El Betis",propiedad de la Real Compañía del Guadalquivir, inaguró la primera linea regular para el transporte de pasajeros de nuestro país uniendo a través del rio Sevilla y
Sanlucar.
Era para la época un auténtico aborto flotante, pues su fondo plano y sus paletas le hacían ser cuando menos un barco feo.
Construido en los astilleros situado en lo que hoy es el barrio de los Remedios, es decir en Triana, fue botado el 30 de Mayo de 1817. Tenía 23 metros de eslora, 6,8 de manga y 0,8 de calado,y conseguía desarrollar una velocidad de 4 nudos.
En su primera singladura, y despreciando el riesgo que conllevaba,tuvo la osadía de salir al mar con objeto de llegar a Cadiz, cosa nada usual en los albores de la navegación a vapor. La entrada del barco en la ciudad gaditana tuvo lugar el 8 de julio ante la gran expectación del numeroso público allí congregado para la ocasión y al día siguiente zarpó hacia la ciudad de Sevilla.
Es difícil de comprender en el siglo XXI lo que supuso aquel primer viaje inagural para las gentes de la época. Baste quizás con recordar que esa misma singladura realizada hasta entonces por un barco de vela duraba en el mejor de los casos dos días, y en el peor hasta diez.Eran los años en que la calma chicha y las mareas invertidas frenaban espectacularmente su avance. A todo ello se unía el insufrible calor en época estival.Así que algo que parece tan normal actualmente como saber con exactitud cuando se sale y cuando se llega a un destino era por entonces toda una novedad y un gran progreso. Aún hoy se encuentran las huellas de tan importante efemeride en la Torre del Oro, en la que fue colocada  en 1917 una lápida conmemoratíva del centenario de la construcción del buque, y en el bar Casa Cuesta en la calle San Jorge un paño de azulejos nos recuerda la linea de vapores  Sevilla- Sanlucar-mar.

11 de julio de 2011

Viejos papeles con sus viejas historias

El complicado arreglo que ha hecho Su Eminencia el señor Cardenal Don Rodrigo de Castro,para contento de muchos y desesperación de algunos. Pues es el caso que Sevilla tenía últimamente hasta casi un centenar de hospitales, unos propios de los gremios,que cada agremiado paga su estipendio para tener asistencia médica,botica, y si queda lisiado o incapaz,una subsistencia asegurada, así como para los huerfanos y viudas si el moría. Además de estos gremiales había otros hospitales, de fundación de los señores reyes,de la iglesia y las hermandades y de alguna persona principal.

 
No puede hacerse mención de todos, pero la Bula de Su Santidad el Papa Pio V, de 6 de Diciembre de 1556,y la Real Orden que envió su Majestad don Felipe II han sido documentos en que se ha basado el señor Arzobispo para realizar la reducción de los hospitales,que eran demasiados, y algunos de ellos inservibles,o empobrecidos,o faltos de enfermos,uniendo sus bienes en dos hospitales principales, el del Espiritu Santo en la calle colcheros y el del Amor de Dios en la calle de su nombre.

Hospitales que se han fusionados al del Amor de Dios: Hospital de la Anunciación,en la calle Castro;el de Nuestra Señora de Belen,de la Plaza de San Francisco;el de San André y San Antón,de la Carretería; el del Cuerpo de Dios en la calle Monteros; el de San Sebastián en la calle Mercaderes;el de Santa Cruz de Jerusalen en la calle Santo Angel; el de San Eloy en la calle de San Eloy;el de San Pedro Mártir en su calle;el de las Virgenes en la Puerta de Triana; el de San Gregorio en la calle de la Sierpe; el de Santa María de Gracia en la calle de la Feria; el de San Benito en la calle de la Seda,junto a San Francisco; el de la Candelaria en la calle de las Palomas;el de las Mercedes en la calle de Las Palmas; el de Santo Tomás en la calle de Sierpes; el de la Candelaria de la Alameda, en la Alameda; el de Santa Catalina en su calle; el de las Cuevas en Triana;el de San Gil en la plaza de esta parroquia; el de San Gregorio de los hortelanos, en el Pozo Santo; el de la Candelaria y Santiago en la calle Santiago; el de San Justu y San Pastor en San Marcos; el de San Miguel en la calle Pozo; el de San Sebastian en su calle; el de la Concepción en la Venera;el de los Angeles en la calle Misericordia;el de la Concepción y Santa Ana en la calle de Don Pedro Niño; el de San Sebastian y Santa Catalina en la calle Bustos Tavera; el de la Concepción y San Pedro en la calle San Vicente al final;el de la Natividad en la Calderería Vieja de San Vicente; el de San Onofre en la Plaza de San Lorenzo; erl de San Juan de Acre en la calle Calatrava, junto a la Cruz del Rodeo; el de las Animas Benditas en su calle; el de San Roman en la calle Sol; el de San Juan Bautista en San Juan de la Palma, el de la Asunción en la misma plaza frente a la puerta de la parroquia; el de Nuestra Señora de la O, en la calle Amor de Dios.


En otro escrirto diré los que se han fusionado al hospital del Espiritu Santo y los que no se han fusionado, pues quedan casi una docena independientes después de hacerse la reducción