Desde Triana

Desde Triana

24 de abril de 2010

Alberto Moriña: El último inquisidor


En recientes declaraciones a varios medios de comunicación, el Delegado de Triana se despachó a sus anchas, arremetiendo contra la Plataforma Trianera, acusándole de ``servir de instrumento político al Partido Popular´´. En dichas declaraciones, manifiesta haberse reunido en diversas ocasiones con la Plataforma Cívica `` ... sin que hayan aportado nada positivo para el barrio, y que, no es posible un diálogo constructivo con quienes no tienen interés ninguno por Triana y solo les mueve el sectarismo político...´´.

En primer lugar, hay que decirle al ínclito Delegado, que la Plataforma Trianera no tiene afinidad política alguna y que entre sus miembros hay gente de todas la edades e ideologías, pero todos se sienten perjudicados por la nefasta gestión de gobierno del Delegado de Triana, que los ha unido en la defensa de los intereses de la gente del barrio.

ºEl Sr Moriña miente como un bellaco al decir que no es posible un diálogo constructivo con la plataforma. Con el que no se puede negociar es con él, que en la única reunión mantenida, se dedicó a jugar con su teléfono móvil y se levantó de la mesa con la falsa acusación de que los miembros de la plataforma le habían insultado. ¿Cabe mayor desprecio a los trianeros? Nadie se ha preocupado de dialogar con los vecinos y comerciantes antes de comenzar las obras de peatonalización,ni se han comunicado las fechas de comienzo de dichas obras. Los comercios se han visto rodeados de máquinas y vallas, que han impedido el normal funcionamiento de sus negocios y tras  las protestas de la plataforma, casualmente, se ha producido una batida de inpecciones en muchos de los comercios del barrio.


Si se puede dialogar, Sr Moriña.No sea mentiroso. La plataforma se ha reunido tanto con el Partido Popular como con el Partido Andalucista, quienes han escuchado atentamente los problemas y las soluciones propuestas, cosa que usted no ha echo.

También miente, cuando dice que "apuesta por una movilidad sostenible y la mejora del medioambiente, con una progresiva reducción del tráfico", ya que, antes de cortar la calle San Jacinto, había que recorrer sólo 100 metros, para acceder al Altozano, mientras que ahora un vehículo recorre cerca de 2 kilómetros... ¡simple cuestión de números! Será que este caballero de la santa inquisición progresista, cuya única virtud reconocida para ocupar el cargo, es la de ser amigo de Susana Diaz, no sabe sumar.

El Sr. Moriña nos tacha de hacerle el trabajo político al Partido Popular, pero en cambio, no dice nada de la Plataforma a favor de la peatonalización, formada por un pequeño grupo, de unas veinte personas, totalmente afines a su partido. Mientras que el Ayuntamiento no ha querido reunirse con nosotros, estos señores de la plataforma pro-peatonalización, tuvieron el "honor" de ser recibidos por el Alcalde y varios concejales, lo que se puede definir como trato de favor.

A nuestra plataforma, con un aval de 8000 firmas recogidas en el barrio, el Alcalde no se ha dignado recibirnos. ¿Habrá que suponer que también se producirá el mismo trato de favor a la hora de recibir subvenciones?

Aceptamos que no sea trianero, que no viva en Triana y ni siquiera se relacione con la gente del barrio, pero no aceptamos que intente humillarnos y mentirnos porque, le guste o no, hay gente que difiere de su forma de pensar, actuar y gestionar.

Sólo porque la Plataforma Trianera piensa de otra manera, este nuevo inquisidor, reencarnación de Torquemada, manda a la hogera de la descalificación a todo el que no comulge con su credo político.

Sr Moriña, sepa que en Triana, el que juega con fuego termina quemándose.

14 de abril de 2010

Carta al Sr Moriña


Sr. Moriña: Usando el símil taurino, en Triana, le han echado el toro al corral, se ha limitado usted a hacer una faena de aliño, y el respetable le ha obsequiado con bronca y una pañolada (dos manifestaciones). Pero parece no enterarse que la afición lo que quiere es que abandone, que se vaya de esta plaza, para lo cual, quizás tengamos que hacer como antiguamente con los buenos toreros trianeros, cogerlo a hombro y cruzarle el puente, pero a diferencia de aquellos que los traían desde Sevilla a Triana, a usted lo sacaríamos del barrio, y aprovechando la moda de poner los candados en el puente, lo engancharíamos con uno a la baranda y tiraríamos la llave al río en señal de amor (hay amores que matan).


Le tocó un magnífico toro, un toro de los de indulto (1er Congreso Internacional de Flamenco). Otros, se lo pusieron en suerte para que se luciera, pero se dio maña para cambiarlo por otro que era burriciego y cojo (1er Encuentro Internacional de Flamenco) pero claro, los aficionados querían espectáculo y usted les ofreció una charlotada impropia de una plaza de 1ª categoría como es Triana.


La revista dedicada a relatar todas las grandezas realizadas en esta plaza (revista Triana) que solo se dedicaba a relatar las grandes faenas de nuestros antepasados, fue fulminada por su poder omnímodo, bien porque no le gustaban sus cronistas, o porque no resaltaban, lo que usted estimaba como sus méritos.


Pero eso si, creó una gacetilla (Triana tu revista) para mayor gloria de sus faenas y las de su cuadrilla, pero por favor, guarde la compostura y procure que no se deslicen errores de tal magnitud, que sean advertidos hasta por un párvulo.


Y que decir de la tertulia, Hecho en Triana, se suponía que iba a presidir dichas reuniones, pero rehusó y se lo encargó a su peón de confianza, y lo que iba a ser una reunión quincenal, se convirtió en 8-10 en cinco años. Cuando comprobó que algunos tertulianos le salieron respondones, dio por terminada dicha tertulia, si usted lo que quería era una corte de aduladores, tenía donde escoger entre tanto estomago agradecido que siempre existe cerca del poder, pero al haber elegido críticos independientes, corría el peligro que le digeran la verdad.


Es usted muy joven, pero no sirve para esto, porque le falta cintura y mano izquierda, no sabe encajar la crítica y le sobra soberbia y prepotencia, como se demostró días pasado cuando al salir de una reunión de la Plaza Nueva, ante las preguntas de los periodistas a un compañero, usted, al cual no le habían preguntado, arremetió airadamente contra una compañera de profesión (Maribel Montaño) y no es la primera salida de tono, en otra reunión con aficionados trianeros, abandonó la sala aduciendo haber sido insultado.


Por eso, por favor vallase, sabe que está acabado, que es un cadáver para la profesión y a esta situación a llegado solo, con su soberbia, falta de diálogo y su sectarismo, que se rige por el conmigo o contra mí.
Haga como el primer espada, cuelgue los trastos y márchese, la afición se lo agradecerá, pero eso si, se le recordará como el peor torero que a pisado esta plaza en 40 años.


Pero claro, usted no es el culpable máximo de su desastre en Triana, es más culpable su apoderada, que aún sabiendo, que usted no era para una plaza de 1ª categoría como ésta, sin, más bien, para el espectáculo cómico taurino del bombero torero, nos lo impuso como primer espada.